Hace algo más de un año, todo cambió y fue a raíz de una publicación que realice y que sin pretenderlo se convirtió en viral, de hecho 752.000 visualizaciones y subiendo lo confirman.
El caso es que a partir de ese momento los cambios se precipitan de manera abrumadora y el balance sin duda es positivo, esto no significa que no haya habido algún fiasco, pero es parte del juego y da perfectamente para otra publicación sobre oportunidades laborales y startup.
Es curioso cómo de pronto te das cuenta de que no estás solo, que hay un montón de personas super interesantes y que de manera altruista te ofrecen su ayuda, aunque solo se para tener una charla telefónica, te das cuenta de que los contactos son vida, ya que aunque estos no puedan en la mayoría de las ocasiones solucionarte el problema, el mero hecho de poder soltar presión es un verdadero alivio.
Ya ni os cuento cuando esas relaciones y tras dos años horribles por lo que todos hemos sufrido en mayor o menor medida se hacen físicas y quedar a tomar un café, se convierte de nuevo en una fantástica experiencia.
Algo que sin duda me hizo ver el cambio fue lo que se generó en mi actitud ante una situación complicada tras tres años de búsqueda incesante de oportunidades laborales, comprendí y fui totalmente consciente de que mi capacidad para reinventarme, hablar de nuevo en público, saber que mi valor no estaba en lo que hasta ese momento había hecho sino en todo lo que estaba por hacer y llegar.
Mi cabeza, mi mente se reiniciaron y expandieron de tal modo que sólo sería comparable a lo que se siente tras mantener la respiración bajo el agua durante mucho tiempo y tomar esa primera bocanada de aire y volver a por más... fue absolutamente reparador y adictivo.
LinkedIn se convirtió de algún modo en nuevo trabajo donde aprender, aportar, observar y del que todos los días nace alguna oportunidad o un contacto que de otro modo no tendrías la posibilidad de conseguir.
La frase de la imagen es absolutamente real y surgió en una de esas innumerables conversaciones, alguien podría decir “pero hombre cómo le dijiste eso” pero el caso es que más que generar rechazo, creó un vínculo de amistad lejana que aún hoy se mantiene y seguimos recordando.
Ya conocéis mi mantra, nada de desanimarse ni perder la fuerza y ganas de pelear, el mero hecho de buscar trabajo ya es un duro trabajo, así pues, sigamos #atopedepower hasta que lo logremos.
Publicar un comentario
Gracias por tu mensaje, tras su revisión, lo publicaremos y daremos respuesta al mismo. Saludos.