Vaya por delante que esta publicación o más bien reflexión es muy personal, no está basada en ningún estudio científico, más allá de mi propia experiencia personal y la vivencia del problema en segunda persona, ya que he sido un espectador obligado de una enfermedad por la que no me gustaría tener que pasar y que de vez en cuando te recuerda que está ahí y que aunque la tengas encerrada y sometida, cualquier día y sin previo aviso retira la anilla y se deja caer a tus pies haciendo añicos todo tu mundo.
Es muy importante y necesario hablar de ella y a estas alturas del texto ya os lo imaginareis, me refiero y la menciono con una mezcla de mucho respeto y si cabe mucho más pudor y miedo, aún para que nadie se sienta ofendido, hablo de Salud mental, pero de la de verdad.
De la que incapacita hasta el punto de ahogarte, de la que no te permite reconocerte ante el espejo por las mañanas, de la que te hace derramar lágrimas sin tener ninguna necesidad porque tu vida es maravillosa, de la que tus seres más cercanos no saben cómo reaccionar y siempre acaba equivocándose.
He querido utilizar esta imagen porque aún recuerdo una conversación sobre el sentimiento que se crea cuando la granada estalla y no, no me gustaría pasar ni un instante en esa maldita habitación.
Últimamente muchas personas la mencionan y está llegando a un punto en que quizás estamos equivocando el término y cuidado porque no es lo mismo.
No es lo mismo llorar por frustración que por depresión
No es lo mismo guardar silencio por desánimo que por angustia vital
No es lo mismo salir a correr que desear salir corriendo y abandonar
No es lo mismo estar cansado de trabajar que trabajar con cansancio constante
Por favor seamos cautos, no maltratemos el término con un hashtag, no caigamos en el error de querer llamar la atención y digamos que nuestra salud mental está en riesgo solo porque no llegamos a conseguir nuestros deseos, porque eso se llama frustración y es muy distinto.
Entiendo que nuestro ego nos pase factura de vez en cuando, pero si caemos en el error de identificar mal nuestro problema estaremos haciendo de menos y mucho daño a todos aquellos que sí lo sufren y aunque sea un tema que se ha de hablar y mucho, se ha de hacer con menos frivolidad y más respeto.
No porque llevemos una mal racha personal o profesional, estamos en riesgo de sufrir una depresión, os compro el desánimo y el cansancio, pero no la enfermedad. No nos autodiagnostiquemos.
Mucho ánimo a los que estamos en búsqueda de trabajo
De la que incapacita hasta el punto de ahogarte, de la que no te permite reconocerte ante el espejo por las mañanas, de la que te hace derramar lágrimas sin tener ninguna necesidad porque tu vida es maravillosa, de la que tus seres más cercanos no saben cómo reaccionar y siempre acaba equivocándose.
He querido utilizar esta imagen porque aún recuerdo una conversación sobre el sentimiento que se crea cuando la granada estalla y no, no me gustaría pasar ni un instante en esa maldita habitación.
Últimamente muchas personas la mencionan y está llegando a un punto en que quizás estamos equivocando el término y cuidado porque no es lo mismo.
No es lo mismo llorar por frustración que por depresión
No es lo mismo guardar silencio por desánimo que por angustia vital
No es lo mismo salir a correr que desear salir corriendo y abandonar
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Por favor seamos cautos, no maltratemos el término con un hashtag, no caigamos en el error de querer llamar la atención y digamos que nuestra salud mental está en riesgo solo porque no llegamos a conseguir nuestros deseos, porque eso se llama frustración y es muy distinto.
Entiendo que nuestro ego nos pase factura de vez en cuando, pero si caemos en el error de identificar mal nuestro problema estaremos haciendo de menos y mucho daño a todos aquellos que sí lo sufren y aunque sea un tema que se ha de hablar y mucho, se ha de hacer con menos frivolidad y más respeto.
No porque llevemos una mal racha personal o profesional, estamos en riesgo de sufrir una depresión, os compro el desánimo y el cansancio, pero no la enfermedad. No nos autodiagnostiquemos.
Mucho ánimo a los que estamos en búsqueda de trabajo
Nos vemos en #LinkedIn
#Sinecesitasayudacuentaconmigo
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